Primeros pasos para una certificación de bienestar animal en vacuno y ovino de carne en Navarra
Los primeros resultados de este proyecto, desarrollado junto con la Cooperativa de Ovino y Vacuno de Navarra COOVA, serán presentados en una sesión online este miércoles 23 de febrero. El objetivo es la creación de un sistema de certificación en bienestar animal que se pueda aplicar a las explotaciones de ovino y vacuno de carne para diferenciar los productos de nuestro sector ganadero en el mercado y dotar de un valor añadido a nuestra carne, con el impacto que eso pueda tener en la economía navarra.
17 de febrero de 2022.- La sociedad pública INTIA y la Cooperativa COOVA presentarán este miércoles 23 de febrero las principales conclusiones y primeros resultados del proyecto que aspira a implantar un sistema de certificación de bienestar animal en el ganado vacuno y ovino de carne de Navarra. La jornada se llevará a cabo de manera virtual a través de la plataforma ZOOM y en ella tomarán parte, Malena San Millán, gerente de COOVA, Juan Andrés de Luis, técnico de esta cooperativa de vacuno y ovino y, por último, Jone Lizarza, técnica de experimentación en ganadería de INTIA. La sesión, que servirán para exponer las necesidades detectadas, los pasos y acciones implementadas, y los resultados, comenzará a las 12:00 horas. La inscripción es obligatoria antes del martes 22 y permite acceder a la sesión de manera telemática.
Ambas entidades, INTIA y COOVA, se unieron en este proyecto con la vocación de diseñar un sistema de certificación del bienestar animal que englobara las distintas etapas productivas: desde el nacimiento y la cría del ganado hasta su sacrificio, incluyendo también el transporte desde las explotaciones hasta matadero y las prácticas previas al sacrificio. La idea es que, tras su validación, la iniciativa pueda extenderse a la totalidad de las personas socias de la cooperativa.
El proyecto propone un sistema de gestión del bienestar animal que incorpora los criterios de sistemas ya definidos, adaptándolos a nuestros sistemas de producción (pequeñas y medianas explotaciones extensivas) e incorporando nuevas tecnologías de medición y registro de aquellos parámetros (indicadores) definidos como necesarios a controlar en el sistema. Así, por ejemplo, para el control ambiental de alojamientos interiores ganaderos se utilizan registradores automáticos de temperatura, humedad y concentración de gases (CO2 y amoníaco).
Por otra parte, para el control de la salud y comportamiento de los animales, se han utilizado dispositivos de geolocalización y monitorización que registran diversa información como su ubicación, el número de pasos, la actividad que desarrolla o el estado del animal. Estos dispositivos cubren las necesidades del proyecto y se han colocado en todas las explotaciones de vacuno participantes.
Por esa razón, se han adquirido e instalado cámaras de vídeo en todas las explotaciones participantes, así como todos los componentes mecánicos, eléctricos y electrónicos que conlleva una instalación de este tipo, con la casuística propia de la ubicación, cobertura de internet, dimensiones y disponibilidad eléctrica en las naves ganaderas o necesidad de instalación de placas solares para el funcionamiento de los equipos. En este sentido se ha realizado un esfuerzo tecnológico muy importante, con las dificultades que ello conlleva, para alimentar a las cámaras y equipos de energía eléctrica en las instalaciones.
También se han realizado análisis para control del cortisol como indicador de estrés animal, de cada explotación ganadera del proyecto, en animales seleccionados. El sistema incluye registros de autocontrol o CheckList de cada explotación, así como una auditoría externa anual.
Las destinatarias de este proyecto piloto son las aproximadamente 350 personas del sector ganadero adscritas a la Cooperativa de Ovino y Vacuno de Navarra (COOVA). Del total de explotaciones asociadas, se han seleccionado 13 explotaciones de vacuno y 7 de ovino. A esto hay que sumar la propia cooperativa COOVA, a través de la cual se comercializa el ganado. Así, quienes en primer lugar se beneficiarán de este sistema serán los 20 profesionales del sector de ovino y vacuno de esta cooperativa que participan en el proyecto y contribuyen con sus explotaciones a la puesta a punto del sistema. Si los resultados son los esperados, se hará extensible al resto de la cooperativa, alcanzando un número cercano a 300.
Este proyecto supone un primer paso para la creación de un sistema de certificación en bienestar animal aplicable a las explotaciones de ovino y vacuno para diferenciar los productos de nuestros ganaderos en el mercado y dotar de un valor añadido a nuestra carne, con el impacto económico que esto se estima va a tener en nuestra Comunidad Foral.
EUROPA INVIERTE EN ZONAS RURALES